Unas 20.000 personas fueron obligadas a abandonar sus hogares este martes tras el hallazgo de varios artefactos explosivos en el barrio de Deutz, en pleno centro de Colonia, Alemania.
Las autoridades de Colonia han iniciado una de las mayores evacuaciones de los últimos años en la ciudad, luego del descubrimiento de varias bombas sin detonar, lanzadas por fuerzas aliadas durante la Segunda Guerra Mundial. Los explosivos, de origen estadounidense, fueron localizados durante unas prospecciones junto al río Rin. La zona afectada ha sido acordonada en un radio de 1.000 metros, abarcando amplios sectores del casco urbano.
La operación de evacuación presenta un desafío logístico significativo debido a la presencia de infraestructuras críticas dentro del perímetro de riesgo. Entre los puntos sensibles se encuentran el Hospital Eduardus, dos residencias geriátricas, y tres puentes clave sobre el Rin. También se han interrumpido rutas de navegación fluvial, parte del tráfico ferroviario cerca de la Estación Central, y varias líneas de transporte urbano.
Además de las restricciones de movilidad, la evacuación ha implicado la suspensión de actividades en nueve centros educativos, 58 hoteles, salas de eventos, empresas y varias oficinas de la administración municipal, incluida la sede del Ayuntamiento. Las labores de desactivación estarán a cargo de expertos en explosivos del servicio de desminado, en coordinación con la policía y los bomberos locales.