El hallazgo del cuerpo de David Esteban Nocua Monrroy, de 14 años, en el río Tunjuelito de Usme, tras ser reportado como desaparecido, revela un crimen con signos de violencia, mientras Bogotá enfrenta un alarmante aumento de homicidios y desapariciones.
La ilusión de una familia de la localidad de Usme por encontrar con vida a su hijo, David Esteban Nocua Monrroy, de 14 años, se convirtió en horror el pasado 10 de mayo. Dos días después de haber sido reportado como desaparecido, su cuerpo fue hallado en inmediaciones del botadero de Doña Juana, al sur de Bogotá.
David fue visto por última vez el 8 de mayo en el barrio Miravalle. Desde ese momento, familiares y vecinos iniciaron una búsqueda incansable con la esperanza de hallarlo con vida. Trágicamente, fue su madre quien dio con el terrible hallazgo tras acudir al CAI La Aurora, donde indicó que el cuerpo de su hijo podría encontrarse en la ribera del río Tunjuelito. La Policía confirmó que, efectivamente, el cadáver del menor fue hallado en esa zona, con evidentes signos de heridas provocadas por arma cortopunzante.
El teniente coronel Norberto Caro, comandante operativo de Seguridad Ciudadana #2, informó que las autoridades ya están investigando las circunstancias de su muerte. Según las primeras pesquisas, todo indica que David fue atacado el mismo día de su desaparición. Sin embargo, la falta de cámaras de seguridad en la zona donde fue encontrado dificulta la reconstrucción de los hechos.
David Esteban Nocua Monrroy no tenía antecedentes judiciales, y su asesinato ocurre en medio de un alarmante aumento de homicidios en Bogotá. Entre enero y abril de 2025 se han registrado 380 homicidios, la cifra más alta desde 2019. Solo en el primer trimestre del año se reportaron 281 casos, lo que representa un aumento del 15,6 % en comparación con el mismo período de 2024.
A este preocupante panorama de violencia se suma la crisis de desapariciones en la capital. Durante el primer trimestre de 2025 se reportaron 1.158 desapariciones en Colombia, de las cuales 705 ocurrieron en Bogotá, lo que equivale a un promedio de seis desapariciones diarias, con un alto porcentaje de víctimas adolescentes entre los 15 y 17 años.
Las localidades más afectadas por esta problemática son Ciudad Bolívar, Kennedy, Bosa, Suba y Santa Fe. Ante el creciente nivel de inseguridad, la ciudadanía exige a las autoridades acciones concretas para evitar que más familias vivan tragedias como la de David Esteban Nocua Monrroy.