La ley de la atracción sostiene que nuestros pensamientos y emociones tienen un poder magnético que atrae a nuestras vidas aquello en lo que nos enfocamos. Popularizada por el libro El Secreto de Rhonda Byrne, esta filosofía se basa en la idea de que si somos capaces de visualizar nuestras metas, sentir gratitud y mantener una mentalidad positiva, el universo nos ofrecerá las oportunidades necesarias para alcanzarlas.
Aunque la ley de la atracción ha sido criticada por algunos como un concepto demasiado simplista, otros creen que su efectividad radica en cambiar la forma en que percibimos el mundo y cómo nos relacionamos con él. Al visualizar y creer en lo que deseamos, nuestra mente comienza a enfocarse en las oportunidades que quizás de otra manera habríamos pasado por alto.
La ciencia aún no ha demostrado de manera concluyente que el universo responde a nuestros pensamientos de forma tangible. Sin embargo, psicólogos y expertos en neurociencia coinciden en que los pensamientos positivos y las creencias fuertes pueden tener un impacto real en nuestras decisiones y en la forma en que interactuamos con el entorno, lo que puede aumentar nuestras posibilidades de éxito.
Por: Evelin Salazar