Henry Cárdenas, presidente de Fedetranscarga, expresó su profunda inconformidad frente al reciente incremento en el precio del galón de A.C.P.M. en Colombia, señalando que el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, no respetó los acuerdos previamente establecidos con el gremio de transportadores.Según Cárdenas, el acuerdo alcanzado el pasado 16 de agosto tenía como objetivo mitigar el impacto de cualquier incremento en el precio del combustible, permitiendo que tanto los transportadores como los generadores de carga se prepararan adecuadamente para enfrentar el cambio.El dirigente gremial criticó la manera abrupta en la que se implementó el aumento, sin un preaviso adecuado, lo que ha generado gran preocupación en el sector. “Hoy los transportadores de Colombia tienen que pagar $2.000 más en las estaciones de servicio”, lamentó Cárdenas, subrayando que este incremento en los costos operativos podría traducirse en un alza en las tarifas de transporte, afectando directamente el costo de la canasta básica familiar.Cárdenas también advirtió sobre la posibilidad de que el aumento en las tarifas de transporte sea inevitable, lo que pondría en riesgo la estabilidad económica de los hogares colombianos.Además, señaló la falta de comunicación y la ruptura de compromisos por parte del Gobierno, indicando que el gremio había propuesto una fórmula para evitar que el alza afectara de manera tan severa a los consumidores.El paro del 31 de agosto, según el presidente de Fedetranscarga, fue una manifestación del descontento de los transportadores frente a lo que consideran una medida injusta y precipitada por parte del Gobierno.
Por: Dana Correal