Más de 200 personas participaron en un encuentro lúdico que promueve la salud mental y el desarrollo emocional en niños y adolescentes.
El municipio de Suesca fue el punto de partida de una estrategia regional que busca proteger la salud emocional de la infancia y adolescencia a través de actividades recreativas y educativas. Durante la jornada, se vivió un ambiente lleno de juegos, dinámicas y reflexión sobre el cuidado del bienestar mental.
La iniciativa busca llegar a diferentes municipios con espacios diseñados para fortalecer la autoestima, la empatía y los vínculos familiares, esenciales para el desarrollo de niños y jóvenes. La propuesta combina el juego con el aprendizaje emocional de una manera cercana y participativa.
Entre las actividades destacadas estuvieron “La escalera del bienestar mental” y “La flor del bien-estar”, diseñadas para promover el pensamiento crítico y la autorreflexión en los más pequeños. Además, los asistentes disfrutaron de competencias como “La carrera de encostalados por el buen-vivir” que fortalecen la cooperación y el buen trato.
Padres de familia, cuidadores y docentes participaron activamente en esta jornada que promueve el acompañamiento emocional desde el hogar y la escuela. “Nos enseñan formas nuevas de comunicarnos con nuestros hijos y estar presentes en su crecimiento emocional”, expresó Andrey Vaquero, uno de los asistentes.
La estrategia tiene como objetivo alcanzar a más de 10.000 niños, niñas y adolescentes con actividades que fomenten su bienestar y felicidad. Se trata de un recorrido que seguirá llevándose a cabo durante el año, generando impacto directo en las comunidades.
La propuesta es promovida por actores sociales que buscan construir entornos protectores donde el respeto, el juego y la escucha sean parte del día a día de la infancia. La comunidad es la principal beneficiaria de este esfuerzo colectivo que pone en el centro la salud emocional de las nuevas generaciones.