En respuesta, el gobernador Juan Diego Patiño Ochoa declaró la calamidad pública durante una sesión extraordinaria del Consejo Departamental de Gestión del Riesgo, con el objetivo de agilizar la atención a los 48 puntos críticos identificados en los 14 municipios del departamento .
El departamento de Risaralda enfrenta una grave situación debido a las intensas lluvias que han provocado 295 emergencias en lo que va del año.
La medida permitirá la implementación de acciones urgentes para mitigar los riesgos y atender a las comunidades afectadas. El gobernador Patiño Ochoa enfatizó la necesidad de actuar con rapidez y decisión para proteger la vida y el bienestar de los risaraldenses.
Entre los municipios más afectados se encuentran Dosquebradas, La Celia, Balboa y La Virginia, donde se han reportado deslizamientos, inundaciones y daños en infraestructura vial. La situación ha llevado a la evacuación de varias familias y ha generado pérdidas significativas en sectores como el campo, la educación y la infraestructura.
El gobernador de Risaralda, Juan Diego Patiño, también hizo un llamado al Gobierno Nacional para que brinde apoyo técnico y financiero en la atención de la emergencia. Se espera que la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y otras entidades del orden nacional se sumen a los esfuerzos departamentales para superar esta crisis.
La declaratoria de calamidad pública busca facilitar la asignación de recursos y la ejecución de obras de mitigación en las zonas más afectadas, así como fortalecer la capacidad de respuesta ante posibles nuevas emergencias derivadas de la temporada de lluvias.