El exfiscal general Francisco Barbosa sorprendió al país al anunciar su renuncia a la precandidatura presidencial para las elecciones de 2026.
Asegura que su decisión responde, principalmente, a la falta de garantías de seguridad para recorrer el país y hacer campaña con libertad. Barbosa hizo un llamado a la unidad de los sectores políticos que se oponen al oficialismo, insistiendo en la necesidad de construir una alternativa sólida y coherente frente al Gobierno.
La salida de Barbosa se suma a una larga lista de precandidatos que han decidido dar un paso al costado antes de que arranque formalmente la carrera presidencial. Según el exfiscal, su decisión no significa una retirada definitiva de la vida pública, sino un acto de responsabilidad ante un panorama político que considera cada vez más hostil. En entrevista con El Tiempo, aseguró que “no se puede hacer política cuando no existen las condiciones de seguridad mínimas para quienes piensan distinto”.
Las elecciones presidenciales de 2026 ya se perfilan como unas de las más concurridas en la historia reciente de Colombia, con más de un centenar de nombres que han manifestado su interés en llegar a la Casa de Nariño. Para algunos analistas, esta cifra refleja un fortalecimiento de la democracia, mientras que para otros es la muestra de una fragmentación política sin precedentes. En este contexto, la renuncia de Barbosa es interpretada como una señal temprana de que la competencia comenzará a depurarse en los próximos meses.
De hecho, el retiro del exfiscal ocurre poco después de que figuras del Pacto Histórico como María José Pizarro, Susana Muhamad y Gustavo Bolívar también desistieran de sus aspiraciones. Este último, sin embargo, dejó abierta la posibilidad de volver al ruedo político si Daniel Quintero gana la consulta interna de su coalición. Con ello, el escenario electoral se mantiene en constante reacomodo, en medio de alianzas, fracturas y movimientos estratégicos de distintos sectores.
Antes de concluir su anuncio, Francisco Barbosa insistió en la importancia de que los colombianos se unan en torno a un proyecto político que defienda las instituciones y los valores democráticos. “No podemos permitir que la división y el miedo sigan marcando el rumbo del país”, afirmó.