Alejandro Gaviria, exministro de Educación del actual gobierno y exministro de Salud en la administración Santos,se refirió a las reformas que cursan en el Congreso sobre ambas temáticas, así como a la polémica que surgió en el país tras el hundimiento del proyecto para uso de cannabis adulto.Reforma educativa, ¿sin plata?En concepto de Gaviria, la reforma a la Educación está construida de tal forma que en sus enunciados generales nadie puede estar en desacuerdo, sin embargo, advirtió, la iniciativa tiene como gran talón de Aquiles la financiación ya que, para hacerla realidad, hay que transformar el Sistema General de Participaciones. De otra forma, podría convertirse en una “institucionalización de la demagogia”.“Falta la reforma más importante que es la reforma a los recursos del Sistema General de Participaciones.Cuando yo fui ministro de Educación, los recursos del SGP que definen la bolsa general y se envían a 97 entidades territoriales certificadas hoy no están alcanzando para pagar la nómina de los 350.00 maestros de Colombia. Si hoy no alcanzan, ¿cómo mañana vamos a tener tres grados adicionales? Eso no tiene ninguna lógica”, indicó el exministro.Con respecto a la calidad educativa y a los malos resultados de las pruebas Pisa en el marco de la Ocde, el exministro Gaviria aseguró que no necesariamente una mayor inversión o cobertura puede traducirse en procesos más efectivos de aprendizaje, ya que es necesario un compromiso de todos los sectores.“La educación de calidad es algo mucho más difícil que la cobertura.La cobertura simplemente es decir: los jóvenes o los niños y las niñas están sentados, llegan allí, lo hacen de manera sistemática. La calidad tiene que ver con la pedagogía, la infraestructura, con la capacitación de los docentes, con la motivación de los estudiantes, con el compromiso de la familia, con un tema en el que tenemos grandes diferencias con los países asiáticos: el compromiso de todos los padres de familia y de la sociedad con los temas educativos. Además, tenemos una coyuntura reciente que tuvo un efecto adverso sobre los resultados circulares que fue la pandemia, ya que en Colombia y América Latina las escuelas y colegios fueron los primeros en cerrar y los últimos en abrir. Eso no pasó en Europa ni en la mayoría de los países asiáticos”, opinó Gaviria.Reforma a la Salud podría pasarEn cuanto a la reforma a la salud, el exministro aseguró que en el Senado de la República, aunque el escenario es incierto, es posible que el Gobierno se la juegue totalmente para no sufrir una derrota definitiva que podría afectar la segunda parte del mandato de manera irrecuperable.“Qué va a pasar, no sabemos. El Gobierno ganó en Cámara negociando uno a uno los votos necesarios. Lo que va a pasar en el Senado es una pregunta abierta.Mi cálculo es que puede pasar, tal vez con cambios.Si no pasa estaríamos en el siguiente escenario político: el Gobierno, al final de su segundo año, esto es ya empezando la segunda parte del mandato, con el sol de espaldas, se enfrenta a una realidad política muy complicada y es que su proyecto bandera, en el que hizo una gran apuesta, donde puso todo, fue derrotado. No pasar significa una derrota tan grande que el Gobierno, en mi opinión, va a tratar de hacer todo lo posible, lo divino y lo humano para que pase, porquesi no pasa, es una derrota política definitiva que lo dejaría casi muerto para empezar ya la segunda parte del mandato”, indicó.Adicionalmente, Gaviria calificó de inédito el tiempo que tardó el trámite en la Cámara de la reforma a la salud. La tardanza, dijo, se debe a queesta genera temores y no ha logrado convencimientos.Según Gaviria, la ejecución de los cambios podrían generar caos en el sistema de salud.“Yo estoy preocupado por la forma en que el paciente va a navegar el sistema y con un gran elemento que es la fragmentación en el diseño que está proponiendo la reforma a la salud (…) Si uno diseña en el papel un proceso y no es claro, nadie sabe quién hace qué.Si ese proceso tiene que atender un 1.200.000 o 500.000 servicios médicos cada día, eso puede ser un caos”, declaró.El exministro Alejandro Gaviria expresó supreocupación por lo que pueda pasar con los pacientes crónicos en medio de la transiciónen cuanto a la forma en que los usuarios van a navegar en el sistema. En cuanto a los recursos, dijo, hay muchas dudas sobre quién hará las auditorías.“Ahora, simplemente es el prestador que hace un servicio, llega a la Adres que supuestamente tiene contratada una auditoría, pero este año ni siquiera ha sido capaz de contratar las auditorías para los pacientes de carros fantasmas o del SOAT. Ese auditor revisa la factura y la Adres va a pagar meses después. Ese proceso como está diseñado puede ser muy engorroso yrepite una historia que ya se conoció en el sistema de salud que fue la historia de los recobros hace 10 años. Fue un escándaloy volverá a repetir el sistema que fracasó de manera estruendosa, que lo quebró”, sostuvo Gaviria.En cuanto a la controversia que sostuvo con el presidente Gustavo Petro a través de la red social X (antes Twitter), por la aparente confusión del ministro de Salud en cuanto al procedimiento para pedir cita con especialistas, Gaviria dijo queponer de ejemplo el sistema inglés o el español no es garantía, ya que la lista de espera puede ser de 7 millones de pacientes en el primer caso o hasta de cinco meses en el país ibérico.Uso de cannabis adultoEl exministro Gaviria aseguró, de otra parte, quela derrota del gobierno de Gustavo Petro y su bancada en el tema del cannabis de uso adulto se debió al escaso nivel del debate y a que el ambiente se caldeópor la derogación del decreto que permitía que la fuerza pública impusiera infracciones a quienes consuman sustancias ilícitas en espacio público.“El Gobierno derogó un decretodel presidente Duque que le impide a la fuerza pública, a la Policía, poner infracciones a jóvenes que consumen sustancias ilícitas, por ejemplo, en un parque. Eso generó una gran confusión.Eso contaminó el debate en el Senadoy con una proposición, que presentó a última hora una representante del Partido Liberal, pasó lo que la gente y muchos políticos, incluso el ministro del Interior, nunca pensaron que iba a pasar y es que iban a derrotar de manera bastante holgada, muy rápida, por fuera del trámite, este primer esfuerzo por la regulación de lo que hoy se conoce como el cannabis de uso adulto.El nivel de la discusión con las citas al reguetón y los argumentos económicos lo vi paupérrimo”, declaró el exministro.
Por: Juan Manuel Gómez