El fiscal especial Jack Smith solicitó que se desestimen los casos contra Donald Trump, argumentando que la política del Departamento de Justicia prohíbe procesar a un presidente en funciones. Esto incluye el caso por mala gestión de documentos confidenciales tras su mandato.
Smith explicó que, aunque la acusación no ha cambiado, las circunstancias sí lo han hecho, y reiteró que el principio de inmunidad del presidente electo justifica el archivo de ambos casos. La jueza Tanya Chutkan concedió una pausa para evaluar el impacto del reciente resultado electoral.
Trump, quien ya enfrenta múltiples cargos penales, celebró la decisión como una victoria del Estado de Derecho y afirmó que su reelección refleja el deseo de la población por acabar con el uso político del sistema judicial.
Por: Sebastián Vera