Con una inversión de $12.320 millones, el proyecto restaurará 800 hectáreas y garantizará agua para Bogotá y municipios de la región central.
La Gobernación de Cundinamarca, el Ministerio de Ambiente, la RAP-E Región Central y Conservación Internacional lanzaron en Guatavita la estrategia “Ordenamiento alrededor del agua y adaptación climática”. El plan se ejecutará en los páramos de Chingaza, Sumapaz, Guerrero y Guacheneque, principales fuentes hídricas de la región.
El proyecto contempla tres fases: conservación de ecosistemas de alta montaña, monitoreo del clima y la biodiversidad, y educación ambiental con restauración ecológica. “Con esta inversión avanzamos hacia la protección de los ecosistemas estratégicos, lo que significa agua limpia y suficiente para las comunidades presentes y futuras”, señaló Diego Leandro Cárdenas Chala, secretario de Bienestar Verde de Cundinamarca.
Entre los beneficios directos destacan la creación de 30 reservas naturales privadas, la instalación de 32 puntos de medición climática, la formulación del plan de manejo del Parque Regional Natural Vista Hermosa de Monquentiva y la reconversión de 180 hectáreas productivas hacia prácticas sostenibles.
El impacto alcanzará a Bogotá y a municipios como Guatavita, Sesquilé, Guasca, Villapinzón, Ubaque, Choachí y La Calera, de donde proviene gran parte del agua que abastece a más de 10 millones de personas en el centro del país.