La conflagración, que inició en horas de la tarde de este sábado 17 de agosto, se ha intensificado debido a los fuertes vientos y las altas temperaturas que se registran en la región.Las autoridades han desplegado a todo su personal disponible para intentar contener el avance del fuego, pero la situación sigue siendo crítica.Los habitantes de la vereda, preocupados por la cercanía del fuego a sus viviendas, han solicitado ayuda urgente a los municipios vecinos y al departamento de Cundinamarca, esperando refuerzos que puedan evitar una tragedia mayor.Hasta el momento, no se han reportado víctimas, pero las pérdidas ambientales son significativas. El incendio sigue activo y las autoridades están en alerta máxima, mientras la comunidad sigue con gran preocupación el avance de las llamas.Se espera que lleguen refuerzos de otros municipios para apoyar en las labores de extinción.
Por: Paola Sanabria