La CAR Cundinamarca suspendió una obra en la vereda Despensas, Guaduas, tras detectar daños ambientales en una zona de protección hídrica. Los trabajos se realizaban sin contar con los permisos exigidos por la normativa ambiental.
Durante una visita técnica realizada por profesionales de la Dirección Regional Bajo Magdalena, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) evidenció el uso de maquinaria pesada para remover grandes volúmenes de tierra en un área de aproximadamente 10.131 metros cuadrados. Esta intervención generó daños significativos en la cobertura vegetal y afectó directamente la zona de ronda de una fuente hídrica cercana, poniendo en riesgo sus funciones ecológicas y los servicios ambientales que presta.
“Solicitamos los permisos ambientales requeridos para este tipo de actividad y encontramos que no fueron tramitados. En consecuencia, procedimos a imponer la medida preventiva”, explicó Juan Cotrino, director regional de la CAR para el Bajo Magdalena. Según indicó, la remoción de capa vegetal y la nivelación del terreno se estaban ejecutando a tan solo 10 metros del cuerpo de agua.
Las autoridades ambientales advirtieron que este tipo de intervenciones, al no estar autorizadas, pueden generar impactos irreversibles en ecosistemas sensibles como las zonas de ronda. Recordaron además que cualquier actividad que involucre el uso de recursos naturales debe ser previamente avalada por las entidades competentes, con el fin de evitar sanciones y prevenir daños ambientales de mayor magnitud.
La CAR reiteró su compromiso con la conservación de las fuentes hídricas del departamento y anunció que hará un estricto seguimiento a las actividades en la zona intervenida. “La protección de las fuentes hídricas es una prioridad. Ninguna obra puede adelantarse sin los permisos respectivos”, concluyó Cotrino, insistiendo en la importancia de la prevención para preservar los ecosistemas estratégicos de la región.