Esta decisión dependerá de indicadores hídricos clave y el consumo responsable de todos los ciudadanos.
El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, informó que la posibilidad de levantar el racionamiento de agua está sobre la mesa debido a la reciente recuperación de los embalses que abastecen la ciudad. Según la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), el nivel de los principales embalses ha aumentado en las últimas semanas gracias a las lluvias registradas en la región, lo que podría significar el fin de la medida.
Sin embargo, Galán enfatizó que la decisión no se tomará de inmediato, ya que se deben evaluar factores como la estabilidad en los niveles de los embalses, las proyecciones climáticas y el comportamiento del consumo de agua en la ciudad.
“Las medidas que tomamos el año pasado sabemos que fueron duras, pero fueron necesarias. Si logramos mantener el promedio en lo que queda de febrero y marzo, y las afluencias nos ayudan, tal vez podamos levantar el racionamiento en abril. Todo depende de lo que pase en marzo”, afirmó Galán.
Actualmente, la ciudad se encuentra bajo un esquema de racionamiento en el que se han aplicado cortes sectorizados para reducir la presión sobre los recursos hídricos. La EAAB indicó que los embalses del sistema Chingaza, que abastecen el 70 % de la ciudad, han mostrado signos de recuperación; sin embargo, aún se requiere prudencia en el consumo.
Por su parte, expertos en gestión hídrica han recomendado mantener las medidas de ahorro incluso si el racionamiento se levanta, ya que las condiciones climáticas pueden cambiar y afectar nuevamente la disponibilidad del recurso. En los próximos días, la Alcaldía hará una evaluación técnica para definir el futuro del suministro de agua en la capital.