En 2026 llegarán a Bogotá 101 nuevos buses eléctricos con un rediseño interior enfocado en la inclusión, la comodidad y la tecnología.
La ciudad de Bogotá se prepara para la llegada de nuevos buses eléctricos que entrarán en operación durante el primer semestre de 2026, como parte del proceso de modernización del sistema TransMilenio y el SITP. Estos vehículos incorporarán mejoras tecnológicas como sensores de peso, cámaras de seguridad y puertos USB, y además presentarán un rediseño interior centrado en la experiencia del usuario, con especial atención a la inclusión y la accesibilidad.
Entre las principales novedades se encuentra la implementación de distintos tipos de sillas: las azules, para personas en condición de discapacidad, mujeres embarazadas y adultos mayores; las aguamarina, para viajes de cuidado, como el traslado de menores o personas con necesidades especiales; y asientos más amplios pensados para personas de talla grande. También se habilitarán espacios específicos para sillas de ruedas, coches y ayudas vivas, como animales de asistencia.
Esta reorganización vendrá acompañada de una nueva señalización dentro de los buses, que clasificará los asientos según el tipo de trayecto: prioritario, de cuidado o sin prioridad. La medida busca ordenar el uso de los espacios, facilitar la movilidad y brindar mayor dignidad a todos los usuarios.
La flota estará compuesta por 25 buses articulados-duales, 68 busetones y 8 padrones, todos con equipamiento de última generación. En particular, los buses articulados-duales permitirán el abordaje tanto en estaciones de TransMilenio como en paraderos convencionales, lo que ampliará significativamente la cobertura del sistema, especialmente en sectores donde aún no hay infraestructura completa.