El secretario de Seguridad de Bogotá, César Restrepo, presentó un balance positivo de la noche de Halloween, destacando el buen comportamiento ciudadano, especialmente de los motociclistas, y la reducción de hechos de orden público en la capital.
Durante la noche del 31 de octubre, Bogotá celebró Halloween con un balance de seguridad favorable, según informó el secretario de Seguridad, César Restrepo. El funcionario resaltó la cooperación de los ciudadanos y, en especial, el cumplimiento del decreto que restringía la circulación de motocicletas con parrillero hombre, medida adoptada para prevenir incidentes durante la jornada festiva.
“La administración y todos los bogotanos agradecen a los usuarios de motocicletas en Bogotá, quienes cívicamente contribuyeron a que ayer fuera un día de brujas con más tranquilidad que en años anteriores”, afirmó Restrepo, subrayando que la mayoría de los conductores acataron la norma y comprendieron su papel en la construcción de una convivencia más segura.
Pese al balance positivo, el secretario señaló que se impusieron sanciones a quienes no cumplieron con la medida. Según las cifras reportadas hasta la medianoche del 31 de octubre, se registraron 830 comparendos por incumplimiento del decreto y 540 vehículos fueron inmovilizados.
Restrepo también informó sobre un lamentable caso en investigación relacionado con el fallecimiento de un estudiante de la Universidad de los Andes. “La información preliminar indica que el ciudadano fue trasladado a una clínica con contusiones y falleció la noche anterior. Tres personas fueron capturadas y podrían estar vinculadas a una riña”, explicó el funcionario, quien insistió en que los hechos aún están bajo indagación.
El secretario aprovechó para reflexionar sobre el impacto del consumo de alcohol en los conflictos ciudadanos. Según datos de la Secretaría de Seguridad, en cuatro de cada diez homicidios registrados en Bogotá hay presencia de alcohol, lo que refleja la influencia del consumo abusivo en la pérdida de control y el incremento de la violencia interpersonal. “El consumo excesivo destruye vidas propias y ajenas. Debemos promover el consumo responsable y la prevención”, enfatizó.








