Con el propósito de brindar herramientas prácticas para consolidar proyectos productivos liderados por mujeres, se desarrolló el taller de finanzas, un espacio de formación que promovió la planificación económica, la sostenibilidad empresarial y la motivación para continuar con procesos de capacitación complementaria.
La jornada, que contó con la participación de mujeres de diferentes sectores rurales y urbanos, fue concebida como una experiencia integral en la que las asistentes adquirieron conocimientos aplicables a la administración de sus iniciativas productivas. Más allá de los conceptos técnicos, el encuentro buscó generar confianza en las participantes, impulsándolas a reconocer que la gestión financiera es un pilar esencial para el crecimiento de cualquier emprendimiento.
Uno de los principales ejes abordados fue la organización de los ingresos y egresos de manera clara y sistemática, entendiendo que un registro preciso de las finanzas permite anticipar riesgos, tomar decisiones más acertadas y abrir posibilidades de expansión. También se insistió en la importancia del ahorro como respaldo en momentos de incertidumbre, así como en la inversión estratégica como camino hacia el fortalecimiento y la diversificación de los negocios.
El componente legal ocupó un espacio destacado dentro del taller. A través de orientaciones sencillas y casos prácticos, se explicaron los beneficios de formalizar las actividades económicas, no solo para acceder a mayores oportunidades de mercado, sino también para garantizar estabilidad y protección en el desarrollo empresarial. Con este enfoque, se busca que cada iniciativa liderada por mujeres pueda consolidarse como motor de progreso familiar y comunitario.
Más allá de las herramientas técnicas, el taller fue también un escenario de encuentro y sororidad. Las asistentes compartieron experiencias, desafíos y logros, reconociéndose como agentes de transformación en sus territorios. De acuerdo con los facilitadores, este tipo de procesos son vitales para sembrar en las participantes la motivación de seguir capacitándose, entendiendo que el aprendizaje continuo es la clave para avanzar con decisión en sus proyectos.
El taller de finanzas dejó como resultado un grupo de mujeres más empoderadas, con nuevas perspectivas sobre la administración de sus recursos y con el compromiso de aplicar lo aprendido en el fortalecimiento de sus negocios. La iniciativa se suma a los esfuerzos regionales por promover la equidad de género y el desarrollo económico sostenible, reconociendo que cuando las mujeres emprenden con conocimiento y confianza, sus comunidades también prosperan.