Las propiedades pasaron a la Sociedad de Activos Especiales, por su presunto uso en actividades relacionadas con el tráfico de estupefacientes, y están avaluadas en más de 3.000 millones de pesos.
Un hotel y otros dos inmuebles ubicados en el municipio de Viotá, Cundinamarca, quedaron en manos del Estado tras una operación de la Fiscalía General de la Nación contra la estructura criminal conocida como Los Buita. La Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio impuso medidas cautelares sobre las tres propiedades, avaluadas preliminarmente en más de 3.000 millones de pesos, por su presunto uso en actividades relacionadas con el tráfico de estupefacientes.
De acuerdo con las investigaciones, uno de los bienes intervenidos es un hotel en el que, presuntamente, residía el cabecilla de la red criminal. Aunque figuraba como encargado de la piscina, el hombre habría utilizado una habitación del establecimiento como centro de operaciones para una red de microtráfico, lo que convirtió al lugar en un punto estratégico para el expendio local de drogas.
Durante más de dos años, fiscales y policías judiciales recolectaron evidencia mediante entrevistas, seguimientos, interceptaciones telefónicas y allanamientos. Las actividades ilícitas se habrían desarrollado entre 2022 y 2024, consolidando una estructura organizada para el narcomenudeo. Antes de imponer las medidas de extinción de dominio, en este lugar se realizaron operativos en los que fueron halladas sustancias ilícitas y capturados varios integrantes de la red, incluido el supuesto líder.
Ante el material probatorio, un fiscal del caso concluyó que los propietarios de los inmuebles facilitaron y permitieron el uso de estos para actividades criminales. Por ello, los bienes quedaron bajo la administración de la Sociedad de Activos Especiales (SAE).