Este martes 6 de mayo concluyó la duodécima congregación general de cardenales en el Vaticano, marcando el cierre de las deliberaciones previas al cónclave, que comenzará mañana, miércoles 7 de mayo, para elegir al sucesor del papa Francisco.
La jornada iniciará con la misa ‘Pro Eligendo Pontifice’ a las 10:00 a.m. (hora local), seguida de la procesión hacia la Capilla Sixtina a las 4:30 p.m., donde se llevará a cabo la primera votación.
A partir del segundo día, se realizarán hasta cuatro votaciones diarias, dos por la mañana y dos por la tarde. Las señales de humo, negra si no hay acuerdo y blanca si se ha elegido al nuevo pontífice, indicarán el resultado de cada jornada.
La Capilla Sixtina ha sido acondicionada para este evento, incluyendo la instalación de una plataforma que nivela el suelo de mármol, mesas, bancos y asientos identificados para cada cardenal. Además, se ha instalado la tradicional chimenea que emitirá las fumatas y se han realizado pruebas técnicas para asegurar su correcto funcionamiento.
Durante el cónclave, los cardenales permanecerán completamente aislados del mundo exterior, sin acceso a dispositivos electrónicos ni comunicaciones, y bajo un estricto juramento de secreto. Este proceso, regido por la constitución apostólica Universi Dominici Gregis, busca garantizar una elección libre de influencias externas y centrada en la reflexión espiritual.