La capital de Norte de Santander impone restricciones nocturnas y ofrece hasta 100 millones de pesos por información sobre los responsables de los recientes ataques.
Las autoridades de Cúcuta decretaron un toque de queda nocturno y anunciaron una recompensa de hasta 100 millones de pesos tras una serie de atentados que sacudieron la ciudad. Explosiones y ráfagas de fusil afectaron varios puntos, dejando heridos y daños en infraestructura.
El ataque más grave ocurrió en el peaje de La Parada, en Villa del Rosario, donde un vehículo cargado con explosivos detonó, hiriendo a tres trabajadores de Invías y dos vigilantes. También se registraron atentados con granadas en estaciones de policía y el CAI de Villa Antigua, generando pánico entre los habitantes.
El gobernador de Norte de Santander, William Villamizar, confirmó que las autoridades trabajan en la identificación de los responsables. La principal hipótesis apunta al Ejército de Liberación Nacional (ELN), grupo armado que mantiene presencia en la región del Catatumbo y ha protagonizado hechos similares en el pasado.
La crisis en el Catatumbo ha provocado el desplazamiento de más de 50,000 personas en el último mes, según la Defensoría del Pueblo. Además, más de 100 asesinatos han sido registrados en lo que va del año, lo que refleja la grave situación de seguridad en esta zona fronteriza.
Las autoridades han intensificado los operativos para prevenir nuevos atentados y reforzar la seguridad en puntos estratégicos. La comunidad, por su parte, exige respuestas efectivas del Gobierno Nacional para frenar la violencia y garantizar la protección de la población civil.