El padre Carlos Saúl Jaimes fue encontrado sano y salvo el domingo 27 de julio en el municipio de Viotá.
Luego de 40 días de intensa búsqueda, fue liberado el sacerdote agustino Carlos Saúl Jaimes, de 30 años, quien desapareció el pasado 17 de junio en la vereda La Unión. El religioso, también administrador de la Hacienda La Tala, fue visto por última vez cuando se dirigía a una cita cerca de una quebrada. Poco después, encontraron su vehículo con el motor encendido y sin signos de violencia, lo que ha generado diversas hipótesis en la investigación.
La Fiscalía Seccional de Cundinamarca, junto con la Policía Nacional y otros organismos, activaron de inmediato un mecanismo de búsqueda urgente y ofrecieron una recompensa de hasta 10 millones de pesos por información sobre su paradero. Aunque inicialmente el caso fue tratado como una desaparición, los indicios posteriores señalaron un presunto secuestro por parte de delincuencia común que se hacía pasar por estructuras armadas. Las autoridades mantienen el caso en investigación reservada mientras se adelantan diligencias judiciales.
El gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, confirmó el regreso del sacerdote y aseguró que se han logrado avances relevantes: “A través de un proceso investigativo robusto hemos venido dando luces y permitiendo identificar los presuntos responsables. Esta investigación criminal arrancó como una desaparición y posteriormente mutó a un secuestro”, precisó el mandatario este lunes en rueda de prensa. Además, subrayó que se está cerca de lograr la captura de los autores del hecho, que podrían estar involucrados en más casos dentro y fuera del departamento.
Por ultimo por medio de un comunicado la comunidad religiosa de la Orden de San Agustín en su cuenta de Facebook manifestó ” damos gracias a Dios por este momento de esperanza y poder haber sostenido con su fuerza al padre, en los días difíciles que ha atravesado” y pidió respeto durante el proceso de recuperación del religioso.