El ente de control pidió al Distrito informes técnicos y advirtió sobre la necesidad de garantizar la seguridad de 40.000 asistentes en futuros espectáculos.
La Procuraduría General de la Nación adelantó este jueves una inspección preventiva en el centro de eventos Vive Claro–Distrito Cultural, en Bogotá, para evaluar las condiciones de seguridad del recinto tras la cancelación del concierto de Kendrick Lamar, que dejó a miles de asistentes sin espectáculo el pasado fin de semana.
El organismo de control solicitó a entidades distritales —entre ellas, el Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (IDIGER), la Secretaría de Gobierno y el Idartes— entregar informes técnicos completos sobre los permisos otorgados, los planes de contingencia y las supervisiones realizadas al escenario, que tiene un aforo proyectado de 40.000 personas.
La diligencia se produjo luego de que la Sociedad Colombiana de Ingenieros advirtiera sobre la necesidad de una revisión exhaustiva de los cálculos estructurales y del sistema de graderías modulares. Según un estudio del Idiger, publicado en septiembre, el recinto presenta riesgos clasificados como bajos y medios en aspectos de drenaje, estabilidad del terreno y diseño de estructuras temporales.
El director del IDIGER, Guillermo Escobar, aseguró que la entidad acompaña de manera permanente cada evento masivo. “En Bogotá lo más importante es cuidar a la ciudadanía, por eso trabajamos para que cada evento sea seguro para todas y todos”, indicó.
Además, el instituto reporta que cada año en la ciudad se congregan, en promedio, más de tres millones de personas en eventos clasificados como de alta y media complejidad, entre conciertos, festivales y encuentros deportivos. Estas cifras reflejan la magnitud de los eventos masivos en la capital y la necesidad de contar con escenarios que cumplan controles técnicos y planes de contingencia permanentes.