El presidente Gustavo Petro planteó al papa León XIV que el Vaticano acoja una nueva ronda de negociaciones de paz con el ELN, con el objetivo de reactivar el proceso tras recientes hechos violentos.
Durante su visita oficial a Roma, el presidente Gustavo Petro sostuvo una audiencia privada con el papa León XIV en la que propuso que el Vaticano se convierta en sede de una nueva etapa de conversaciones con el Ejército de Liberación Nacional (ELN). El mandatario afirmó que la Iglesia Católica puede ofrecer un espacio neutral, simbólico y moralmente respetado, propicio para retomar la confianza en el proceso.
Petro enfatizó que la influencia histórica de la Iglesia sobre el ELN, cuyos orígenes están vinculados a la teología de la liberación, podría facilitar una reorientación hacia el diálogo. “Que el amor eficaz cubra la codicia y nos lleve a la paz”, expresó ante el sumo pontífice, reiterando su voluntad de no cerrar las puertas a una salida negociada, pese a la reciente masacre en el Catatumbo atribuida al grupo insurgente.
La propuesta se produce en un contexto de incertidumbre sobre la continuidad de la mesa de diálogos, congelada tras una serie de ataques armados. Aun así, Petro insistió en que la paz debe construirse “incluso en los peores momentos”. La canciller Laura Sarabia acompañó al presidente durante la visita y destacó la disposición del Vaticano a contribuir como garante en los procesos de reconciliación en Colombia.
El papa León XIV, sucesor de Francisco, expresó interés en apoyar los esfuerzos de paz en América Latina y fue invitado por el presidente colombiano a visitar el país. La decisión final sobre el reinicio del diálogo con el ELN dependerá de la respuesta del grupo armado, que hasta ahora no se ha pronunciado sobre la propuesta del Gobierno.