La representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia, Juliette de Rivero, condenó el asesinato de Caicedo a través de un mensaje en su cuenta de X (antes Twitter), exigiendo que los grupos armados respeten la vida e integridad de los defensores de derechos humanos. De Rivero resaltó que la labor de estos líderes es fundamental para proteger a la población civil y garantizar los principios democráticos en zonas afectadas por la violencia, como Arauca.El asesinato de Albeiro Caicedo es un recordatorio de la creciente vulnerabilidad de los líderes sociales en Colombia, especialmente en áreas rurales y fronterizas. La ONU y organizaciones de derechos humanos han reiterado la necesidad urgente de implementar medidas de protección para estas personas, quienes representan una voz de apoyo para sus comunidades en un contexto de conflicto constante. Además, han señalado que la falta de garantías de seguridad y la impunidad siguen siendo los principales obstáculos para proteger la vida de quienes arriesgan todo por defender los derechos y la paz en el país.Finalmente, De Rivero instó al Estado colombiano a tomar acciones inmediatas para investigar y sancionar a los responsables de los crímenes contra defensores de derechos humanos. La representante también reiteró el llamado a fortalecer los mecanismos de protección y a priorizar la seguridad de los líderes comunitarios, que desempeñan un rol crucial en las regiones más afectadas por el conflicto armado.
Por: Dana Correal