La mesa de negociación entre el Gobierno y la guerrilla del ELN enfrenta una crisis por los retrasos en la implementación de los acuerdos y las constantes distancias entre ambas partes, así lo indicó Laura Bonilla, Subdirectora de la Fundación Paz y Reconciliación, en entrevista con El Dorado Radio.Con relación a las declaraciones de Olmedo López, exdirector de la Unidad para la Gestión del Riesgo, que entregó, a la Corte Suprema de Justicia, sobre la supuesta financiación del Gobierno a la guerrilla, la subdirectora de Pares indicó que las mismas no afectan directamente las negociaciones, pero sí pueden impactar la legitimidad del proceso ante la sociedad colombiana.Para Bonilla, es importante que el ejecutivo demuestre su capacidad en la implementación de los acuerdos, incluso en pequeñas acciones, para recuperar la confianza de la ciudadanía.Es necesario adelantar conversaciones con el ELN sobre cómo se ve la guerrilla en la paz, “es algo que la sociedad colombiana no tiene claro en este momento”, a “la sociedad le cuesta trabajo entender si el ELN va o no va a la paz”, resaltó la subdirectora.Según la fundación, el panorama de violencia en el país es complejo, con un aumento en la extorsión y el secuestro desde el 2020. Aunque es difícil asignar responsabilidades específicas al ELN, Bonilla explicó que la extorsión se ha convertido en una fuente principal de financiación para muchos grupos armados.Finalmente, la subdirectora de Pares se refirió a la importancia de evaluar los ceses al fuego de manera regional. En algunos departamentos, como en el Cauca, estos ceses no han sido funcionales, mientras que, en otras zonas, como Norte de Santander, han contribuido a reducir la violencia.La clave, de acuerdo con Bonilla, es mantener los ceses en regiones donde se han mostrado efectivos y continuar avanzando en las negociaciones para lograr una paz estable y duradera.
Por: Melisa Munárriz y Leonardo Ramos