El huracán Helene llegó a Florida el jueves 26 de septiembre en la región del Big Bend, en Florida, como un huracán de categoría 4 con fuertes vientos de 225 kilómetros por hora. Al poco tiempo se degradó a tormenta tropical, pasando por los estados de Georgia, Carolina del Norte, Carolina del Sur y Tennessee, dejando con su paso inundaciones, cortes de luz, daños millonarios y más de 90 muertes.Al momento, cientos de carreteras aún permanecen cerradas y más de 2 millones de clientes siguen sin electricidad; por su parte el presidente Joe Biden visitará algunas de las comunidades afectadas al finalizar esta semana, “tan pronto como no interrumpa las operaciones de respuesta a emergencias”, dijo la Casa Blanca el domingo por la noche.Hablará este lunes por la mañana en la Casa Blanca sobre los esfuerzos federales en marcha para acelerar la llegada de recursos a donde se necesitan.Por su parte, el candidato Trump dijo que “antes de comenzar, me gustaría enviar mi amor y oraciones a las familias de los que han muerto y a todos los que están desplazados y sufriendo a raíz de la destrucción del huracán en el sur, especialmente en Florida, Georgia, Alabama, Tennessee y, en particular, el oeste de Carolina del Norte, que sufrió un tremendo golpe”, esto en un mitín en Erie, Pensilvania.
Por: Zaira Herrera