El avión se encuentra en confiscación permanente y en investigación por presuntos actos de corrupción sobre Venezuela. La aeronave, con un valor estimado de US$ 13 millones, había estado en la República Dominicana en los últimos meses.”Incautar el avión de un jefe de Estado extranjero es un hito en asuntos criminales. Estamos enviando un mensaje claro de que nadie está por encima de la ley, nadie está fuera del alcance de las sanciones estadounidenses”, afirmó uno de los funcionaros estadunidenses.Varias agencias federales estuvieron involucradas en la incautación, entre ellas, además del Departamento de Seguridad Nacional, el Departamento de Comercio, la Oficina de Industria y Seguridad y el Departamento de Justicia.Los funcionarios estadounidenses trabajaron estrechamente con República Dominicana, quienes notificaron a Venezuela sobre la incautación, sin embargo, el gobierno venezolano no se ha pronunciado al respecto.
Por: Zaira Herrera