El programa, liderado por la Secretaría de Energías y Minería Sostenible tiene como objetivo garantizar la conexión por hogar —estimado en $1,8 millones— y busca mejorar la salud, el ambiente y la calidad de vida de las familias que aún cocinan con leña o carbón.
En Cundinamarca sigue creciendo la cobertura del servicio de gas natural, uno de los compromisos incluidos en el Plan de Desarrollo Departamental. Las metas 303 y 304 contemplan conectar a 16.900 familias durante este cuatrienio y cofinanciar las redes de distribución que hacen posible llevar el servicio hasta los hogares rurales.
En diálogo con El Tren de la Mañana, la secretaria de Energías y Minería Sostenible, Sandra Milena Fonseca Casallas, explicó que desde el año pasado se han desarrollado estrategias que priorizan las necesidades más urgentes de los municipios. “Metodológicamente revisamos los planes de desarrollo municipales para identificar los temas más importantes. Cerca de 18 alcaldes incluyeron la gasificación dentro de su top 10, y hemos estado cumpliendo paulatinamente con esos compromisos”, afirmó.
Uno de los proyectos más recientes fue socializado este martes 8 de octubre en el municipio de Tibacuy, donde 690 familias rurales de las veredas Albania, Bateas, Capotes, Calandaima, La Cajita, La Vuelta y San Francisco podrán acceder al gas natural. La Gobernación de Cundinamarca destinará $1.242 millones para hacer realidad esta obra.
“Con los recursos de la Gobernación lo que hacemos es hacer posible que este servicio llegue a las zonas más apartadas de los municipios. Estamos cerrando financieramente los proyectos para que, junto con las empresas, podamos llegar a hogares que normalmente no serían atendidos”, explicó Fonseca Casallas.
Sobre la financiación, la funcionaria detalló que el departamento aporta hasta $1,8 millones por familia, mientras que el resto del costo —que puede ser unos $800.000, dependiendo de la distancia desde la vivienda hasta el punto de conexión— puede financiarse directamente con las empresas. “Ellos ofrecen plazos de hasta cinco años con cuotas cómodas para que nadie se quede por fuera del servicio”, añadió.
La meta para final de este año es alcanzar las 8.000 familias conectadas, aunque la secretaria aclaró que esto depende de factores externos como el clima o la decisión de las propias familias. “Este es un proceso completamente voluntario. Hay personas que prefieren seguir cocinando con leña o cilindros, y eso también se respeta. Según esas variables, esperamos cerrar el año con cerca del 50% de la meta cumplida”, comentó Fonseca.
En paralelo, esta semana el gobernador Jorge Emilio Rey Ángel anunció un nuevo proyecto de gasificación rural que beneficiará a 940 familias campesinas en los municipios de Jerusalén, Apulo, Tocaima, Quipile y Nariño, con una inversión total de $7.500 millones.








