Los incidentes ocurrieron entre el 11 y el 13 de abril de 2025, sin que se reportaran víctimas mortales, aunque un militar resultó herido por esquirlas durante el segundo ataque.
En menos de 72 horas, la estación de Policía del municipio de Morales, en el departamento del Cauca, ha sido blanco de tres ataques armados perpetrados por disidencias de las FARC. Los agresores emplearon drones cargados con explosivos y ráfagas de fusil, generando pánico entre la población civil y poniendo en alerta a las autoridades locales.
Los ataques en Morales se suman a otros similares registrados en los municipios de Piendamó y Cajibío, donde también se utilizaron drones con explosivos para hostigar a las fuerzas del orden. En Cajibío, un artefacto fue lanzado tras la celebración del Domingo de Ramos, dejando al menos un herido. Las autoridades atribuyen estos hechos a la estructura Jaime Martínez, liderada por alias ‘Iván Mordisco’, que busca consolidar su control territorial en el suroccidente del país.
El uso de drones con explosivos por parte de grupos armados ilegales representa una amenaza creciente para la seguridad en Colombia. Según el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), en 2024 se registró un aumento del 89 % en las víctimas por artefactos explosivos, alcanzando un total de 719 personas afectadas, la cifra más alta en los últimos ocho años.
El CICR reportó que estos incidentes se concentran principalmente en zonas con presencia de actores armados no estatales y ha reiterado la necesidad de adoptar medidas urgentes para mitigar el impacto sobre la población civil y garantizar el cumplimiento del derecho internacional humanitario.