La administración municipal del Soacha refuerza su compromiso con la protección del territorio rural en el corregimiento uno, tomando medidas enérgicas contra las construcciones ilegales que proliferan en la zona. En una reciente jornada de inspección y control, se llevaron a cabo acciones concretas que incluyeron la demolición de cuatro predios que no cumplían con la normativa urbanística vigente y la intervención en un predio utilizado como centro de acopio de estibas, el cual representaba un peligro latente debido a su alta vulnerabilidad a incendios.Las intervenciones se realizaron en la vía de ingreso al corregimiento uno, en los sectores de las veredas Panamá y El Limonar, donde las autoridades municipales detectaron varias construcciones que no cumplían con los permisos necesarios y presentaban riesgos tanto para la comunidad como para el medio ambiente. En respuesta, se ejecutaron demoliciones con el objetivo de evitar la consolidación de asentamientos irregulares que podrían desencadenar problemas mayores en el futuro, como deslizamientos o incendios durante la época de sequía.La administración municipal enfatiza que la protección de la zona rural es una prioridad, especialmente en momentos donde los fenómenos climáticos extremos, como las sequías, pueden agravar los riesgos asociados a las construcciones ilegales. La intervención en estos predios contribuye a la seguridad y sostenibilidad del corregimiento uno, reduciendo la posibilidad de emergencias y cuidando el entorno de prácticas urbanísticas irresponsables.La alcaldía hace un llamado a la comunidad para respetar las normas de uso del suelo y obtener los permisos necesarios antes de iniciar cualquier construcción. Asimismo, se invita a denunciar cualquier actividad irregular que comprometa la seguridad del territorio, pues solo a través de un trabajo conjunto entre autoridades y ciudadanía se logrará mantener la integridad de la zona rural y evitar futuras problemáticas.Con estas medidas, el municipio ratifica su compromiso con el orden urbano, la legalidad y la protección del patrimonio natural, asegurando un desarrollo sostenible y seguro para todos los habitantes del corregimiento uno.
Por: Evelin Salazar
