Agua a la Vereda se convierte en una alianza entre la Gobernación de Cundinamarca, a través de EPC, y los campesinos con el objetivo de transformar los acueductos veredales en prestadores rurales sostenibles para mejorar la calidad de vida de los campesinos, cerrando la brecha histórica entre lo urbano y lo rural.De esta manera, en la convocatoria que se encuentra actualmente vigente hasta el 31 de julio del presente año, se proyecta un inversión de 15.000 millones de pesos con los que se pretende fortalecer a 150 acueductos rurales, optimizando su infraestructura con recursos que oscilan desde 50 hasta 150 millones según las necesidades técnicas.Según lo expuesto por EPC, el programa se planeó bajo la premisa de “no dar el pescado, sino enseñar a pescar”, es decir que no se resume solo en obras sino que enseña a los acueductos a convertirse en empresas sostenibles en el tiempo y con proyección de crecimiento.Finalmente, se conoció que en esta nueva convocatoria de Agua a mi Vereda desde el Gobierno Departamental, se buscará brindar un apoyo integral a los procesos de los acueductos rurales a nivel técnico, administrativo, legal, comercial y financiero.
Por: Dumar Benito Torres