Con rutas espirituales, cultura viva y seguridad garantizada, municipios se preparan para recibir a miles de visitantes en todo el territorio.
La llegada de Semana Santa moviliza a miles de viajeros por todo el país, y en este panorama, los municipios del centro de Colombia están más que listos para ofrecer experiencias inolvidables. Con más de 2.600 posadas rurales registradas, la región abre sus puertas al turismo cultural, patrimonial y espiritual, integrando a sus comunidades en esta gran apuesta por el desarrollo local.
Desde las riberas del Magdalena hasta las cumbres andinas, familias, parejas y grupos de peregrinos encontrarán una oferta de alojamiento auténtica, económica y cercana a la naturaleza. Cada posada representa no solo una opción cómoda para hospedarse, sino también una fuente de ingreso directo para las comunidades.
Entre las rutas recomendadas para esta temporada están la “Ruta Jubileo de la Esperanza”, que recorre templos históricos en Sibaté y Guasca; la “Ruta Historia y Arte”, que resalta íconos como la Catedral de Zipaquirá y la Basílica de Ubaté; y la “Ruta Fe y Tradición”, que conecta pueblos devotos como Bojacá, Chocontá y Supatá. Todas ofrecen una experiencia enriquecedora para el alma y los sentidos.
La seguridad y el bienestar de los visitantes han sido prioridad. Tras el Consejo Nacional de Seguridad Turística en Zipaquirá, se activaron operativos especiales con la Policía, el Ejército y Migración Colombia, así como una línea de atención directa: 321 900 4157, disponible para turistas durante toda la temporada.
Frente al brote de fiebre amarilla, el llamado es claro: quienes viajen a zonas cálidas deben vacunarse con al menos 10 días de anticipación. “Una sola dosis puede salvar vidas”, recalcó el gobernador Jorge Emilio Rey Ángel, al referirse a municipios con alerta como Girardot, Tocaima y Puerto Salgar.
La invitación es a vivir una Semana Santa conectados con la fe, respetando las tradiciones y cuidando la salud.