La administración departamental destinó $142 millones para entregar alimentos a hogares vulnerables en 15 municipios.
La Gobernación de Cundinamarca entregó 1.062 ayudas humanitarias alimentarias a familias víctimas del conflicto armado, con una inversión de $142 millones orientada a atender necesidades básicas de esta población.
La jornada benefició a hogares de Agua de Dios, Fosca, Guachetá, Guataquí, Medina, Nariño, Nimaima, Nocaima, Paratebueno, Quetame, San Antonio del Tequendama, Sesquilé, Susa, Une y Villeta. Los municipios fueron priorizados según los criterios establecidos por la Secretaría de Gobierno, entre ellos la situación de vulnerabilidad y las afectaciones recientes por emergencias. De los 39 municipios postulados, 12 cumplieron los requisitos y tres más fueron incluidos por contingencias registradas en las últimas semanas.
El secretario de Gobierno, Luis Fernando Navarro Jiménez, explicó que la entrega de las ayudas busca atender de manera directa a las familias inscritas en el Registro Único de Víctimas. Señaló que esta acción hace parte del plan de atención que adelanta el departamento para fortalecer la articulación con las administraciones locales.
La estrategia se enmarca en la Ley 1448 de 2011 y contempla la coordinación entre la Gobernación y los municipios para garantizar la entrega oportuna de los apoyos alimentarios. Con estas entregas, el departamento avanza en los procesos de asistencia y reparación integral dirigidos a las familias afectadas por el conflicto armado.








