Alrededor de 20 personas, incluidos cuatro periodistas, murieron en un doble bombardeo israelí, un ataque que también dejó heridos a rescatistas y comunicadores que acudían tras la primera explosión.
El hospital Nasser, uno de los últimos centros médicos en funcionamiento en el sur de Gaza, fue atacado en dos ocasiones por el Ejército israelí. El primer bombardeo impactó un área hospitalaria donde se realizaban cirugías y, minutos después, un segundo ataque golpeó a periodistas y rescatistas que acudieron al lugar.
Entre las víctimas se encuentran comunicadores de Associated Press, Reuters, Al Jazeera, France 24 y otros medios internacionales. El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) denunció que con estas muertes ya suman al menos 196 periodistas palestinos asesinados desde octubre de 2023, cuando inició la actual escalada tras el ataque de Hamás en Israel.
Las agencias condenaron lo ocurrido. “Estamos devastados al enterarnos de la muerte de nuestro contratista Hussam al-Masri”, expresó Reuters. Por su parte, AP advirtió que sus reporteros trabajan en condiciones extremadamente peligrosas.
El Ejército israelí reconoció la autoría del ataque y anunció una investigación. El jefe del Estado Mayor, Eyal Zamir, ordenó una pesquisa, mientras que las Fuerzas de Defensa de Israel reiteraron que no atacan a periodistas “como tales” y que buscan mitigar daños a civiles.
No obstante, organizaciones humanitarias cuestionan la efectividad de estas pesquisas y recordaron que Israel mantiene un bloqueo informativo en Gaza, al restringir el ingreso de corresponsales internacionales, lo que ha obligado a depender de reporteros locales para documentar la guerra.