La exfuncionaria recibió sobornos para aprobar ilegalmente un plan de reestructuración financiera de la EPS.
Eva Katherine Carrascal Cantillo, exfuncionaria de la Superintendencia Nacional de Salud, fue condenada a 38 meses y 12 días de prisión por recibir pagos ilegales para favorecer a Asmet Salud EPS con la aprobación de un plan de reestructuración que no reflejaba la verdadera situación financiera y administrativa de la entidad.
La condena fue impuesta tras un preacuerdo con la Fiscalía General de la Nación, mediante el cual Carrascal aceptó su responsabilidad en el delito de cohecho impropio. Además de la pena privativa de la libertad, que cumplirá en su lugar de residencia por ser madre cabeza de familia, la juez le impuso una multa equivalente a 40 salarios mínimos de 2018 e inhabilidad para ejercer funciones públicas durante 80 meses.
Según la investigación, en 2017 la entonces delegada para la Supervisión Institucional se reunió con el representante legal de Asmet Salud, Gustavo Adolfo Aguilar Vivas, a quien le ofreció su ayuda para formular y aprobar un plan de mejoramiento financiero y administrativo a cambio de 300 millones de pesos. El dinero fue entregado en dos pagos, en diciembre de 2017 y enero de 2018.
Carrascal recibió el dinero y además asesoró directamente a la EPS, pidió modificaciones al plan presentado y gestionó los documentos para lograr su aprobación ante la Superintendencia. Como resultado, Asmet Salud renovó su licencia de funcionamiento, pese a enfrentar una profunda crisis en la prestación del servicio y en su estructura interna.
Cabe recordar que Carrascal Cantillo ya había sido condenada en mayo de 2022 a seis años y ocho meses de prisión por recibir sobornos superiores a 700 millones de pesos para beneficiar a otras entidades del sector salud. En esta ocasión, se comprometió a reintegrar el dinero recibido en un plazo de seis meses, de los cuales ya devolvió una parte.