Las manifestaciones en Aguas Calientes bloquearon durante varias horas el acceso a Machu Picchu. Más de 1.400 visitantes fueron trasladados en tren hacia Cuzco, luego de un operativo policial que habilitó de manera temporal las vías férreas.
En el distrito de Machu Picchu Pueblo, conocido como Aguas Calientes, residentes y manifestantes bloquearon los accesos al servicio de transporte hacia la ciudadela inca. La protesta estuvo dirigida contra la compañía que administra los buses turísticos, a la que acusan de seguir operando pese a que su contrato de concesión habría caducado hace dos semanas.
El cierre de las vías ferroviarias generó que centenares de visitantes quedaran atrapados sin poder salir de la zona. El Ministerio de Cultura confirmó que, con apoyo policial, alrededor de 1.400 turistas fueron evacuados hacia la ciudad de Cuzco durante la tarde del miércoles. Autoridades locales aseguraron que se instalaron puestos de control para evitar nuevos enfrentamientos.
Los viajeros, entre ellos ciudadanos de diferentes nacionalidades, permanecieron varias horas en estaciones ferroviarias y hoteles cercanos a la entrada del santuario. Imágenes difundidas en medios peruanos muestran largas filas de personas esperando la salida de trenes especiales, organizados de manera extraordinaria para garantizar su traslado seguro.
Mientras tanto, representantes del Gobierno central iniciaron conversaciones con líderes de la protesta, a fin de resolver la disputa por la concesión del transporte hacia el sitio arqueológico. Operadores turísticos advirtieron que la continuidad de las manifestaciones podría afectar la temporada de visitas y generar impactos económicos en toda la región de Cuzco.