El líder supremo Alí Jameneí advirtió que cualquier intervención militar de EE. UU. contra Irán causará un “daño irreparable” y prometió castigo a Israel tras los ataques a instalaciones nucleares en Teherán.
En una alocución televisada, el ayatolá afirmó que “la nación iraní se opondrá firmemente tanto a una guerra impuesta como a una paz impuesta” y que el pueblo “nunca se rendirá a los dictados de nadie”. El mensaje responde a los recientes ataques israelíes, que destruyeron parte del complejo nuclear de Natanz y objetivos del IRGC en Teherán.
Como represalia, la Guardia Revolucionaria lanzó una nueva ofensiva de misiles y drones contra Tel Aviv, Haifa y otras ciudades israelíes, en el marco de la décima ola de su operación Promesa Verdadera 3. Las autoridades reportan decenas de muertos y heridos civiles en ambas partes.
Estados Unidos, por su parte, ha elevado su tono. El presidente Donald Trump advirtió que conoce la ubicación del líder iraní, aunque descartó atacarlo “por ahora”. No obstante, exigió la “rendición incondicional” del régimen y declaró que “la paciencia se está agotando”.