Autoridades ambientales lograron establecer que los trabajos realizados obstaculizaron el caudal de una quebrada, alterando su cauce natural.
Una intervención con maquinaria pesada pretendía modificar más de 50 mil metros cuadrados de una zona montañosa en la vereda La Florida, en Nocaima (Cundinamarca), al parecer para proyectos urbanísticos. Las labores incluyeron remoción masiva de tierra, tala de árboles y destrucción de cobertura vegetal nativa.
Durante una visita de control, funcionarios de la CAR Regional Gualivá detectaron también la alteración del cauce de una quebrada, cuyo flujo fue obstaculizado por las obras realizadas sin autorización.
La autoridad ambiental ordenó la suspensión inmediata de los trabajos, que representan un riesgo para el equilibrio ecológico y la seguridad del entorno. Según lo verificado en terreno, se estaban creando terrazas que cambiaban significativamente la topografía natural.
“Seguiremos actuando en la salvaguarda de nuestros recursos naturales como medida de protección para las próximas generaciones”, expresó Héctor Fabián Garavito, director de la regional CAR Gualivá.
Por su parte, la CAR anunció que continuará con los operativos de inspección y vigilancia para prevenir nuevas afectaciones al medioambiente y hacer cumplir la normatividad vigente.