Se cumplen más de 24 horas, cuando los manifestantes decidieron cerrar las principales vías de acceso al municipio. La alcaldesa advirtió que las protestas se originan por la inconformidad con las zonas de estacionamiento regulado desde el 2022.
Desde el pasado lunes, el municipio de La Mesa, Cundinamarca, enfrenta bloqueos en la vía nacional a la altura del sector conocido como La Y, lo que ha generado complicaciones en la movilidad hacia Girardot y otras poblaciones. La alcaldesa, Laura Marcela Londoño explicó que la inconformidad ciudadana se debe al contrato de zonas de estacionamiento regulado y firmado en 2022. “Este contrato fue heredado de la administración pasada y nos hemos visto en la obligación jurídica, administrativa y financiera de cumplirlo”, señaló.
La mandataria aseguró que, desde el inicio de su gobierno, ha intentado negociar ajustes para reducir el impacto de la medida. “Logramos eliminar algunas zonas de cobro, congelamos la tarifa desde 2022, establecimos 15 minutos de parqueo gratuito y aumentamos la participación del municipio hasta el 55 % en función de la ocupación”, afirmó. Sin embargo, insistió en que no ha sido posible anular el contrato por vía legal.
Las protestas, que comenzaron de manera pacífica, derivaron en bloqueos que afectan la vida diaria del municipio. “Ayer en la noche cerraron todas las vías alternas, lo que imposibilitó el tránsito. Dos colegios suspendieron clases y hasta las ambulancias tuvieron dificultades para movilizar pacientes hacia Girardot”, advirtió la alcaldesa.
Frente a la situación, la mandataria lamentó la imagen que está dejando la crisis en la localidad. “Los mesunos somos gente amable y cordial, pero este tipo de acciones terminan afectando nuestra economía y nuestro día a día. No compartimos que la protesta se haya llevado a vías de hecho”, expresó.
Finalmente, denunció la participación de personas externas en las manifestaciones y reiteró su disposición al diálogo. “Ya tenemos evidencia de que hay pagos a personas de afuera para mantener los bloqueos e incluso he recibido amenazas a título personal. Mi invitación es a que nos sentemos con los comerciantes y encontremos soluciones, porque al final los más afectados somos nosotros mismos”, concluyó.