Una operación conjunta en la cárcel El Barne, en Cómbita (Boyacá), permitió desarticular una red criminal que extorsionaba a reclusos y sus familias, realizaba extorsiones digitales y traficaba drogas al interior del penal.
Durante los allanamientos fueron incautados más de 2.800 gramos de estupefacientes, junto con armas blancas, celulares, tarjetas SIM y otros elementos utilizados para la comisión de delitos desde el interior de la prisión. Las autoridades también evidenciaron que las víctimas pagaban por visitas, alimentación y supuesta protección dentro del penal.
Como resultado de esta operación, liderada por la Policía Metropolitana de Tunja, el Gaula, la Fiscalía General de la Nación y el INPEC, fueron capturadas tres mujeres en el exterior del centro carcelario e imputados seis internos, todos los implicados quedaron a disposición de la Fiscalía.
La intervención forma parte de una estrategia nacional contra las economías criminales que operan dentro de los establecimientos penitenciarios. Según las autoridades, estas estructuras afectan a las víctimas directas, también al sistema de justicia y seguridad penitenciaria.