El hallazgo incluyó 30 minas antipersonal que, según informes de inteligencia, fueron trasladadas desde Venezuela con la intención de ser utilizadas para llevar a cabo atentados contra unidades de la Fuerza Aérea.
En una operación conjunta, el Ejército Nacional y la Policía Nacional de Colombia localizaron y destruyeron un depósito ilegal de explosivos perteneciente al Frente de Guerra Norte del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en el área rural de Maicao, La Guajira.
La operación se llevó a cabo en el kilómetro 10 de la vía al corregimiento La Majayura, donde las autoridades, basándose en trabajos de inteligencia militar, identificaron el escondite de los artefactos explosivos. Especialistas en desactivación de explosivos realizaron la destrucción controlada del material, asegurando la zona y evitando posibles daños a la población civil.
Este decomiso se suma a esfuerzos previos en la región para combatir las actividades ilícitas del ELN. En agosto de 2024, una operación similar resultó en la incautación de 21 artefactos explosivos improvisados, 89 cartuchos de diferentes calibres, cinco proveedores y una escopeta, entre otros materiales.
Las autoridades han expresado su preocupación por la procedencia de estos explosivos, señalando que fueron transportados desde Venezuela, lo que subraya la complejidad de las dinámicas fronterizas y la necesidad de cooperación internacional para enfrentar estas amenazas.