La Secretaría de Energía de Cundinamarca anunció la apertura de un sondeo de información para proveedores interesados en implementar soluciones fotovoltaicas en el municipio de Ubalá.
El proceso SIP-001-2025, lanzado en el marco del compromiso del departamento con la sostenibilidad ambiental, busca recopilar información de proveedores interesados en desarrollar sistemas de generación fotovoltaica que permitan abastecer a zonas de difícil acceso. La fecha límite para la participación en este proceso es el 27 de marzo de 2025, y los detalles están disponibles en la plataforma SECOP II.
Este proyecto contempla la instalación de paneles solares con una capacidad total de más de 1 megavatio (MW), acompañados de sistemas de almacenamiento con baterías de alta eficiencia, que permitirán garantizar el suministro continuo de energía. Con ello, se busca beneficiar a más de 5.000 habitantes, con una proyección de cobertura que alcanzará los 7.500 habitantes en los próximos 10 años.
Además, se estima que la implementación de estas soluciones permitirá la reducción de aproximadamente 1.200 toneladas de CO₂ anuales, lo que equivale a retirar de circulación cerca de 400 vehículos particulares en un año. Asimismo, se proyecta un ahorro de hasta el 40% en costos de energía para las comunidades beneficiadas, facilitando el acceso a un recurso esencial para el desarrollo económico y social.
Según la Secretaría de Energía de Cundinamarca, la inversión estimada en esta iniciativa superará los 15.000 millones de pesos, destinados a la infraestructura, instalación y puesta en funcionamiento de los sistemas solares. La financiación proviene de fuentes mixtas, incluyendo recursos del departamento y aportes del Gobierno Nacional, alineados con la estrategia de energía renovable y eficiencia energética en Colombia.
Ubalá es un municipio con una geografía estratégica para la implementación de energías renovables, dado su potencial de radiación solar de 5,2 kWh/m² al día, una de las más altas en el departamento. Su ubicación y condiciones climáticas favorecen la generación de energía fotovoltaica, lo que permitirá maximizar la eficiencia de los paneles solares y garantizar un suministro confiable para la población.
Este tipo de proyectos generan impacto ambiental positivo e impulsan la economía local a través de la generación de empleo en el proceso de instalación, mantenimiento y operación de los sistemas. Se estima que, durante la fase de implementación, se crearán al menos 150 empleos directos e indirectos, beneficiando a técnicos, ingenieros y otros profesionales del sector energético.
Además, se realizarán capacitaciones dirigidas a la comunidad y a operadores locales, con el fin de fomentar el uso eficiente de la energía y garantizar el adecuado mantenimiento de la infraestructura. Este enfoque busca empoderar a la población, brindándoles conocimientos que les permitan aprovechar al máximo la energía renovable y contribuir a la sostenibilidad del proyecto en el largo plazo.