El presidente Gabriel Boric decretó estado de excepción y toque de queda, descartando un ataque y responsabilizando al sector privado.
Un apagón masivo dejó sin energía a millones de chilenos, afectando transporte, hospitales y servicios públicos. El presidente Gabriel Boric decretó estado de excepción y toque de queda, descartando un ataque y responsabilizando al sector privado.
Las primeras investigaciones indican que la falla se originó en el sistema interconectado central, lo que produjo un colapso generalizado. Boric descartó que se haya tratado de un ataque cibernético o sabotaje, pero responsabilizó al sector privado por fallas en el mantenimiento y gestión del sistema eléctrico. Empresas del sector han asegurado que trabajan para restablecer el servicio lo antes posible.
El apagón afectó principalmente a Santiago, Valparaíso y Concepción, dejando sin funcionamiento semáforos y paralizando el metro de la capital. Hospitales tuvieron que activar sus sistemas de energía de emergencia para garantizar la atención de pacientes. Autoridades han desplegado equipos de emergencia para atender la crisis y evitar saqueos o alteraciones del orden público.
El gobierno anunció medidas adicionales para estabilizar el sistema y aseguró que se adelantará una investigación para determinar responsabilidades. el presidente llamó a la calma y aseguró que la prioridad es restablecer la normalidad lo antes posible. Se espera un informe técnico en las próximas horas para esclarecer el origen exacto de la falla.