Enfrentamientos entre el Ejército sirio y la alianza islamista Organismo de Liberación del Levante dejaron un saldo de al menos 89 muertos en la provincia de Alepo. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres, el ataque insurgente, respaldado por otras facciones armadas, tomó por sorpresa a las fuerzas leales al presidente Bashar al Assad en una antigua carretera que conecta Alepo con Idlib.
Entre los fallecidos, 52 pertenecen al Organismo de Liberación del Levante, mientras que 37 eran soldados del Ejército sirio. Además, cinco efectivos de las fuerzas gubernamentales fueron capturados por los insurgentes, quienes se apoderaron de almacenes de armas y vehículos blindados.
La ofensiva también dejó un saldo de un civil muerto y ocho heridos, en medio de bombardeos aéreos de represalia por parte de las fuerzas de Damasco que, según reportes, alcanzaron objetivos estratégicos y zonas civiles.
Este ataque ocurre en un contexto de relativa calma desde el alto el fuego pactado en 2020 entre Turquía y Rusia, pero refleja la fragilidad de ese acuerdo. Los rebeldes avanzan hacia el oeste de Alepo, a tan solo 10 kilómetros de la ciudad, posicionándose cerca de la carretera que conecta con Idlib, el último bastión opositor en Siria.
Por: Alfredo Vidal