Las interrupciones constantes en el servicio eléctrico han generado molestias y problemas graves en Bojacá y Zipacón, afectando tanto la zona urbana como la rural. Las fallas recurrentes en el suministro han impactado el bienestar de la comunidad, que depende de este recurso para sus actividades diarias y el funcionamiento de dispositivos esenciales.Desde hace varios meses, los residentes de ambos municipios han sufrido periodos de varios días sin electricidad, afectando electrodomésticos y a personas que requieren oxígeno. En Bojacá, la situación llevó a la comunidad a bloquear la vía Mosquera-La Mesa durante tres horas, exigiendo la restauración inmediata del servicio.En respuesta, el alcalde de Bojacá ha mantenido comunicación con la empresa prestadora, reportando la situación a través de un enlace municipal, quien ha asegurado que el servicio puede ser restablecido con mayor rapidez si se mejora la eficacia en la atención a las zonas afectadas.Mientras tanto, en Zipacón, las veredas Cubia y Bobasé se han visto especialmente afectadas, con cortes de hasta ocho días. La comunidad ha evaluado la posibilidad de realizar cierres viales, como última medida para hacer visibles sus necesidades ante las autoridades.El alcalde de Zipacón expresó su apoyo a los habitantes, destacando los esfuerzos de la administración para garantizar un servicio de calidad. “Nosotros estamos comprometidos en buscar soluciones rápidas para evitar las afectaciones constantes que perjudican la vida de nuestros residentes”, afirmó.Esta problemática evidencia la urgencia de mejorar la infraestructura eléctrica en la región, beneficiando a más de 15,000 personas que dependen de un servicio adecuado. Las autoridades locales siguen insistiendo en una solución definitiva para estabilizar el suministro eléctrico y asegurar el bienestar de sus comunidades.
Por: Alison Infante