Cundinamarca vive momentos de alerta debido a las intensas lluvias que han afectado a varios municipios del departamento. El monitoreo en tiempo real se realiza desde el Puesto de Mando Unificado (PMU), un sistema de gestión de riesgos que involucra a más de 116 municipios, con el objetivo de prevenir y mitigar los efectos de las precipitaciones. La directora de la Unidad de Gestión del Riesgo de Cundinamarca, Natalia Gómez, informó que los cuerpos operativos y las autoridades municipales están trabajando de manera coordinada para afrontar la emergencia.El informe de las autoridades indica que, a pesar de las afectaciones viales y algunos daños en viviendas, hasta el momento no se han registrado víctimas mortales. Entre las zonas más afectadas se encuentran Cajicá, La Calera y algunos puntos de Sabana Centro. Según Gómez, las afectaciones en estos municipios han sido principalmente de infraestructura vial y en algunos casos, daños menores en viviendas, como tejados caídos. Afortunadamente, no se hA pesar de los esfuerzos locales, la directora de Gestión del Riesgo destacó que la situación es dinámica y los pronósticos del IDEAM advierte que las lluvias continuarán hasta diciembre. Estas precipitaciones, que podrían aumentar hasta un 40% respecto a años anteriores, tienen el potencial de afectar más áreas, especialmente por los eventos climáticos atípicos que se han registrado, como granizadas y heladas. En respuesta, las autoridades mantienen el Puesto de Mando Unificado operando las 24 horas para coordinar la atención de emergencias.Además de la gestión de riesgos, se están llevando a cabo iniciativas de limpieza preventiva en los canales y cuerpos hídricos. La estrategia”Cundinamarca Preparante al Riesgo”incluye la colaboración de los municipios, el Ejército y organizaciones como la Cruz Roja y Bomberos. La meta es evitar desbordamientos de ríos y quebradas, que pueden causar inundaciones en las comunidades cercanas. En total, se han realizado limpiezas en más de 11 municipios, y se espera continuar con esta labor en áreas más afectadas.El trabajo conjunto de las autoridades y la comunidad ha sido clave para la mitigación de riesgos. Los ciudadanos también juegan un papel fundamental en este proceso. La recomendación de las autoridades es limpiar regularmente los canales y no arrojar residuos en las vías públicas ni en los cuerpos hídricos. Además, se insta a los cundinamarqueses a reportar cualquier aumento en los niveles de los ríos a las alcaldías ya los bomberos, para poder tomar acciones rápidas.Finalmente, la directora Gómez destacó la importancia del voluntariado, especialmente de los bomberos y la Defensa Civil, quienes contribuyen de manera vital en las labores de monitoreo y atención de emergencias. Aunque el departamento cuenta con un fondo para emergencias, la colaboración de todos los sectores es fundamental para afrontar esta temporada de lluvias de manera eficaz y oportuna. En las próximas semanas, las autoridades seguirán trabajando en coordinación con los municipios para garantizar la seguridad y el bienestar de la población.
Por: Alison Infante