La razón principal es una disputa sobre el predio donde se proyectaba realizar la ampliación, conflicto que ha impedido continuar con la ejecución del proyecto.
Para enfrentar el déficit de camas hospitalarias en la ciudad, Galán anunció la construcción de una nueva torre de urgencias en el hospital de Engativá y dos nuevos hospitales en las localidades de Suba y Fontibón, que atenderán principalmente a casos de baja y mediana complejidad.
La decisión responde a la necesidad de reducir la brecha en la atención médica en Bogotá, donde actualmente hay alrededor de 15,000 camas, cuando se requieren al menos 19,000 para cumplir con el estándar de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Con la construcción de estos nuevos centros, se sumarán 323 camas adicionales, superando las 126 que contemplaba el proyecto inicial de ampliación.
El proyecto original, que formaba parte de una APP denominada Parque Hospitalario de Engativá, proponía reforzar las instalaciones y construir en el predio vecino al hospital. Sin embargo, debido al conflicto sobre el terreno, la administración decidió replantear el enfoque.
La nueva estrategia busca descongestionar el sistema de salud en el borde occidental de la ciudad, mejorar la atención y reducir los desplazamientos de los pacientes que requieren servicios hospitalarios.
