La intervención se realizó tras una denuncia de habitantes de la vereda Paramón, en el municipio de Pulí.
Una grave afectación ambiental fue detectada en el Distrito Regional de Manejo Integrado (DRMI) Cerro El Tabor, luego de que técnicos de la CAR constataran la tala ilegal de más de 20 árboles nativos en una zona de recuperación y conservación.
Durante un operativo de control, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), a través de su Dirección Regional Magdalena Centro, verificó la tala de 22 ejemplares de especies como ocobos, cámbulos, higuerones, mohos y cucharos, que en total representaban 36 metros cúbicos de madera. Ninguno de estos aprovechamientos contaba con autorización por parte de la autoridad ambiental.
“En desarrollo de nuestra visita generamos el correspondiente informe técnico y dimos apertura al proceso sancionatorio contra los presuntos infractores”, aseguró Juan Carlos Escobar, director regional de la CAR. El funcionario agregó que al menos dos de los árboles talados estaban ubicados dentro de la zona protectora de nacimientos de agua que abastecen al río Magdalena.
El Cerro El Tabor es considerado un punto estratégico para la preservación de la biodiversidad, especialmente de avifauna migratoria. La tala, además de afectar especies vegetales nativas, compromete el equilibrio hídrico de la región, al incidir directamente sobre fuentes que abastecen a municipios como San Juan de Rioseco, Beltrán y Pulí.
La CAR reiteró su compromiso con la vigilancia de los recursos naturales y la defensa de las áreas protegidas, reafirmando su papel como garante del patrimonio ambiental del departamento.